Hay una frase recurrente entre los traders, sobre todo los que empiezan:
"Esta vez me las he saltado… pero la próxima respetaré mis reglas."
Spoiler: no, no lo harás.
Porque cada vez que haces eso, no solo pierdes dinero.
Estás perdiendo autoridad sobre ti mismo.
Y eso es mucho más caro.
El problema no es técnico, es personal
Muchos creen que se pierde en trading por una mala entrada, por usar un indicador raro, o por ese clásico “tuve mala suerte”.
Pero la mayoría de veces lo que realmente se va por el desagüe es algo más profundo: el respeto propio.
Ese momento en el que decides hacer algo que sabes que no deberías.
Ese “da igual, esta vez no pasa nada” que va calando.
Esa excusa que fabricas en tiempo récord y que suena razonable justo hasta que ves el resultado.
Entrenar el caos
Cada vez que rompes tus propias normas, estás mandando este mensaje a tu cerebro:
“Lo que digo que haré, no importa. No hace falta cumplirlo.”
Y créeme, eso se enquista. Y rápido.
Pocas cosas son tan peligrosas como un trader que ha aprendido a ignorarse a sí mismo sin sentirlo.
El verdadero daño
Romper una regla no daña solo esa operación.
Daña tu sistema.
Tu confianza.
Tu capacidad para mirar al gráfico sin rabia ni culpa.
El problema no es solo que pierdas.
Es que pierdes la fe en tu criterio.
Y sin fe, no hay disciplina.
Y sin disciplina… no hay sistema que valga.
Nadie te castiga. Excepto tú.
El mercado no te va a regañar por saltarte una regla.
Pero tú sí.
Con culpa.
Con frustración.
Con decisiones aún peores, tomadas con la cabeza embotada y la rabia activada.
¿Quieres mejorar?
No empieces por cambiar de indicador.
Ni tu Excel.
Ni por comprarte otro libro de “Price Action”.
Empieza por mirarte al espejo sin tener que bajar la mirada.
Cumple lo que prometiste cuando no estabas con el dedo en el ratón y el corazón a 1000 por hora.
Las reglas no son una cárcel
Son un cinturón de seguridad.
Están ahí para protegerte de tu peor versión:
esa que aparece cuando hay ruido, velocidad, dopamina y miedo.
Te aseguro, que seguir el plan te hará realmente llegar a sentir que disfrutas de esto enormemente
El final del juego
Así que la próxima vez que te veas tentado a romper tu sistema…
Recuerda:
no estás perdiendo dinero.
Estás perdiendo el autoliderazgo.
Y sin eso, no hay forma de sobrevivir en este negocio.
¿Te ha calado?
Entonces quizá sea hora de tomarte esto en serio.
No más estrategias milagro.
No más improvisación con nombre de "intuición".
Más respeto.
Más criterio.
Más consistencia.
Y si quieres trabajar en eso con gente que también se lo toma en serio…
Te espero dentro.
Excelente artículo David. Todo tan cierto como la vida misma.